Navegar por el lago Nahuel Huapi, recorrer la Isla Victoria,
ascender al Cerro Catedral y esquiar en sus pistas, acampar a orillas del Lago
Gutiérrez, visitar la Villa de Llao Lao, son sólo alguna de las actividades que
los turistas pueden realizar en Bariloche,
dentro de una lista casi inagotable.
Esta bella ciudad del oeste rionegrino es uno de los
principales destinos para el turismo argentino e internacional gracias a sus hermosos
paisajes, a la buena calidad de los servicios ofrecidos a los visitantes y a la
calidez de sus pobladores, siempre pendientes de satisfacer los requerimientos
de quienes llegan a conocer la región.
Además de visitar sus principales atractivos, los turistas
podrán disfrutar de una esmerada atención en los diferentes complejos hoteleros que se encuentran en la ciudad. Los hay de todos los tipos y categorías para
responder a todo tipo de presupuestos y planes de viaje, desde hoteles de
diferentes estrellas, pasando por cabañas, aparts y también hostels. Una vez en
destino, los visitantes podrán llenar de actividades interesantes cada uno de
los días destinados a la estadía.
Además de conocer las principales locaciones de la ciudad y
de las regiones aledañas, un aspecto destacado a tener en cuenta para disfrutar
durante las vacaciones es la gastronomía típica del lugar, que es por demás
atractiva y tentadora. Por eso y para no perdérselas, es interesante conocer
cuáles son las comidas preferidas por
los turistas en Bariloche.
La oferta gastronómica se hace presente en más de 400
establecimientos, cada uno con sus especialidades entre las que pueden
mencionarse parrillas, ahumaderos, confiterías, chocolaterías, casas de té,
restaurantes gourmet, entre otros. Algunos de los platos más tentadores y que
es habitual encontrar en las cartas de los restó son: trucha en diferentes
tipos de preparaciones, cortes de ciervo, jabalí, además de otros cortes de
carnes blancas y rojas como cordero patagónico. Los acompañamientos más
habituales son las salsas a base de hongos regionales, vino blanco, manteca
negra, quesos, a modo de mención de algunas dentro de una deliciosa oferta.
Una mención aparte merecen las exquisitas foundes – de
tradición suiza- que también es habitual encontrar en los menús. Las hay de
diverso tipo pero sin dudas las predilectas son la de queso como plato
principal (acompañada por diversos cortes de carne y vegetales), y la de chocolate amargo a la hora del postre,
servida con diferentes tipos de frutas y masas finas.
Otras delicias dulces que los visitantes de Bariloche no
olvidarán son los mousses de distintos gustos, además de los chocolates y helados
artesanales, las tartas dulces –sobre todo las elaboradas con frutos típicos
como las grosellas, arándanos, moras o frambuesas- además de las preparaciones
calientes como los crépes Suzette.
Las opciones también son más que atractivas a la hora de
elegir qué tomar. En toda la región se elaboran excelentes cervezas artesanales
a base de distintos tipos de lúpulos, que vale la pena beber bien fría,
acompañada con una muestra de patés caseros. Para los amantes de la enología,
en todo Río Negro y Neuquén se producen muy buenos vinos y champagnes con cepas
especialmente cultivadas en zonas frías, por lo que una estadía en Bariloche es
una excusa perfecta para degustarlos.